jueves, 9 de abril de 2020

Pareja de ases.

La verdad es que no sé bien cuando o cómo empezó todo esto. En mi cabeza hay un cúmulo de historias y flashes que conforman ese todo y no sé bien qué momento elegir. Tal vez podría ser cuando te encontré borracho y perdido en medio de valencia y corriste hacia mí como un poseso. También podría ser cuando respondiste a una pregunta aludiendo a algo que yo había hecho y me puse súper roja por ello. O incluso cuando te pregunté si te gustaban los macarrones con queso.
Hay muchísimos momentos en esta historia que me hacen darme cuenta de lo muy feliz que soy a tu lado. Hay incluso algunos momentos malos en los que si ves la historia sin contexto podrías pensar que estoy loca por seguir contigo, que vas a terminar haciéndome daño y que no eres bueno para mí.  Pero algo que estoy aprendiendo contigo es a arriesgar, a que no todo puede ser planeado y a que hay que disfrutar también de los imprevistos. Y créeme cuando digo que hasta los malos momentos son buenos contigo. Porque pasamos por ello juntos, porque aprendemos sobre la marcha y cometemos errores que nos hacen estar más unidos, que nos ayudan a entendernos mejor, a pedirnos perdón, a aceptarnos. Y eso, para mí, no es comparable a nada.

Me alegro muchísimo de que aparecieses en mi vida para romper todos mis esquemas, Bonito del mar.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...